Una investigación reveló que la cera del oído podría usarse para medir los niveles de estrés y depresión en las personas.

De acuerdo con información del medio Independent, publicada el 4 de noviembre del 2020, investigadores desarrollaron un dispositivo, similar a un bastoncillo de algodón tradicional, para recolectar una muestra de cerumen que luego es enviada a un laboratorio, donde se analiza la hormona del estrés cortisol.

Los resultados, publicados en la revista académica Heliyon, podrían apuntar a una forma más barata y efectiva de medir el cortisol para controlar la depresión y las condiciones relacionadas con el estrés, señala el medio.

Los científicos creen que la prueba también puede ser útil para medir los niveles de glucosa, para controlar la diabetes o, potencialmente, los anticuerpos del covid-19. Además se detalla que el examen se puede realizar en casa sin supervisión clínica.

Según Independent, la técnica más común para medir la hormona cortisol es con muestras de cabello, pero esto requiere más tiempo y es más costoso en comparación con el método de cerumen y, generalmente, está más sujeto a fluctuaciones a corto plazo en el cortisol.

El investigador principal de la investigación, el Dr. Andrés Herane-Vives, del Instituto de Neurociencia Cognitiva del University College de Londres, habló  del procedimiento y señaló que: «la toma de muestras de cortisol es notoriamente difícil, ya que los niveles de la hormona pueden fluctuar, por lo que una muestra podría no ser un reflejo exacto del cortisol crónico de una persona. Además, los métodos de muestreo en sí mismos pueden inducir estrés e influir en los resultados”.

Herane-Vives explicó que «los niveles de cortisol en la cera de los oídos parecen ser más estables y con el nuevo dispositivo es fácil tomar una muestra y analizarla de forma rápida, económica y eficaz».

Sobre el desarrollo del dispositivo, el investigador dijo que se inspiró en otra cera natural, el panal de abejas, ya que se conoce que está bien conservado y es resistente a la contaminación bacteriana.

Además detalló que el cerumen tiene propiedades similares, lo que lo hace muy adecuado para el muestreo en el hogar, ya que se pueden enviar al laboratorio por correo sin mucho riesgo de contaminación.

El investigador detalló al medio que el dispositivo de muestreo de cerumen es similar a un hisopo de algodón, pero con un freno que evita que se adentre demasiado en el oído y cause daños. La punta se cubre con una esponja de material orgánico que se empapa en una solución.

De acuerdo con el medio, ya se ha llevado a cabo un estudio piloto de 37 voluntarios para probar diferentes técnicas de muestreo de cortisol.

El equipo de investigación, que incluyó a científicos del Reino Unido, Chile y Alemania, tomó muestras de la cera de los oídos de los participantes mediante un procedimiento de jeringa estándar y luego realizó un seguimiento de un mes utilizando la misma muestra en un oído y el nuevo dispositivo en el otro.

Los investigadores también analizaron muestras de cabello y sangre de los mismos participantes y descubrieron que las de cerumen producían más cortisol que las de cabello, y la técnica de frotarse las orejas era el método más rápido y potencialmente más barato.

Tras el estudio piloto, Herane-Vives mencionó que si el dispositivo resiste un mayor escrutinio en ensayos más grandes, «esperamos transformar el diagnóstico y la atención de millones de personas con depresión o afecciones relacionadas con el cortisol, como la enfermedad de Addison y el síndrome de Cushing, y potencialmente muchas otras condiciones”.